EVANGELIO DE HOY Jueves 12 de Diciembre de 2013

Santoral

· Primera Lectura: Zacarías 2,14-17
"Canto de la Hija de Sión."
Festeja y aclama, joven Sión, que yo vengo a habitar en ti -oráculo del Señor-.Aquel día se incorporarán al Señor muchos pueblos y serán pueblo mío; habitaré en medio de ti, y sabrás que el Señor de los ejércitos me ha enviado a ti. El Señor tomará a Judá como lote suyo en la tierra santa y volverá a escoger a Jerusalén. ¡Silencio todos ante el Señor, que se levanta en su santa morada!

· Salmo Responsorial: 95
"Contad las maravillas del Señor a todas las naciones"
Cantad al Señor un cántico nuevo, / cantad al Señor, toda la tierra; / cantad al Señor, / bendecid su nombre. R.
Proclamad día tras día su victoria. / Contad a los pueblos su gloria, / sus maravillas a todas las naciones. R.
Familias de los pueblos, aclamad al Señor, / aclamad la gloria y el poder del Seño, / aclamad la gloria del nombre del Señor. R.
Decid a los pueblos: " El Señor es rey, / el afianzó el orbe, y no se moverá; / él gobierna a los pueblos rectamente."

· Evangelio: Lucas 1,39-45
"¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor?"
Unos días después, María se puso en camino y fue aprisa a la montaña, a un pueblo de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. En cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isabel del Espíritu Santo y dijo a voz en grito: "¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Dichosa tú, que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá."

Reflexión
Una de las actitudes constantes en la vida de María es su servicio. 

Ya desde el evangelio, en el pasaje que hoy nos propone la liturgia, María se presenta como la servidora, la que está siempre atenta a las necesidades del prójimo. Desde que Jesús nos la dejó como Madre, ella, con gran amor y diligencia, continúa realizando esta acción de amor en sus hijos.

Cuando María de Guadalupe aparece, viene a darle nuevas fuerzas a un pueblo que se encuentra en crisis después de la caída del Imperio Azteca. Las palabras que dijo a Juan Diego son el signo, y a la vez promesa perenne, que nos ayudan a confiar en ella y en su poderosa intercesión: "Por qué temes, ¿no estoy yo aquí que soy tu Madre?".

Por un lado quisiera hoy invitarte a crecer en esta confianza amorosa a nuestra Madre Santísima, y por otro lado, adoptar esta actitud de servicio característico de María. A María Santísima le gusta ser venerada y amada, pero mucho más le gusta ser imitada.

Este día seré muy consciente de que mi ser es el ser de Cristo, y haré todas las cosas como él las haría. 

Permite que el amor de Dios llene hoy tu vida. Ábrele tu corazón. 
Como María, todo por Jesús y para Jesús. 

Pbro. Ernesto María Caro.