Lecturas de la Misa del día y sus reflexiones – Lunes 25 de enero de 2016.


Tiempo Litúrgico: Ordinario
Color: Blanco

Santos:



Primera Lectura: Hechos 9, 1-22
Levántate, recibe el bautismo que por la invocación de Jesús, lavará tus pecados

En aquellos días, Saulo, amenazando todavía de muerte a los discípulos del Señor, fue a ver al sumo sacerdote y le pidió, para las sinagogas de Damasco, cartas que lo autorizaran para traer presos a Jerusalén a todos aquellos hombres y mujeres que seguían la nueva doctrina.

Pero sucedió que, cuando se aproximaba a Damasco, una luz del cielo lo envolvió de repente con su resplandor. Cayó por tierra y oyó una voz que le decía: "Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?" Preguntó él: "¿Quién eres, Señor?" La respuesta fue: "Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Levántate. Entra en la ciudad y allí se te dirá lo que tienes que hacer".

Los hombres que lo acompañaban en el viaje se habían detenido, mudos de asombro, pues oyeron la voz, pero no vieron a nadie. Saulo se levantó del suelo, y aunque tenía abiertos los ojos, no podía ver. Lo llevaron de la mano hasta Damasco y allí estuvo tres días ciego, sin comer ni beber.

Había en Damasco un discípulo que se llamaba Ananías, a quien se le apareció el Señor y le dijo: "Ananías". El respondió: "Aquí estoy, Señor". El Señor le dijo: "Ve a la calle principal y busca en casa de Judas a un hombre de Tarso, llamado Saulo, que está orando". Saulo tuvo también la visión de un hombre llamado Ananías, que entraba y le imponía las manos para que recobrara la vista.

Ananías contestó: "Señor, he oído a muchos hablar de ese individuo y del daño que ha hecho a tus fieles en Jerusalén. Además, trae autorización de los sumos sacerdotes para poner presos a todos los que invocan tu nombre". Pero el Señor le dijo: "No importa. Tú ve allá, porque yo lo he escogido como instrumento, para que me dé a conocer a las naciones, a los reyes y a los hijos de Israel. Yo le mostraré cuánto tendrá que padecer por mi causa".

Ananías fue allá, entró en la casa, le impuso las manos a Saulo y le dijo: "Saulo, hermano, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino, me envía para que recobres la vista y quedes lleno del Espíritu Santo". Al instante, algo como escamas se le desprendió de los ojos y recobró la vista. Se levantó y lo bautizaron. Luego comió y recuperó las fuerzas. Se quedó unos días con los discípulos en Damasco y se puso a predicar en las sinagogas, afirmando que Jesús era el Hijo de Dios.

Todos los que lo oían quedaban sorprendidos y decían: "¿No es este hombre el que andaba persiguiendo en Jerusalén a los que invocan el nombre de Jesús y que ha venido aquí para llevarlos presos y entregarlos a los sumos sacerdotes?" Pero Saulo, cada vez con más vigor, refutaba a los judíos que vivían en Damasco, demostrándoles que Jesús era el Mesías.

Salmo Responsorial: 116, 1. 2
R/  Id al mundo entero y proclamad el Evangelio.
  • Alabad al Señor, todas las naciones, aclamadlo, todos los pueblos. R. 
  • Firme es su misericordia con nosotros, su fidelidad dura por siempre.R

Evangelio según Marcos 16, 15-18
Id al mundo entero y proclamad el Evangelio

En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo: "Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda creatura. El que crea y se bautice, se salvará; el que se resista a creer, será condenado. 

Estos son los milagros que acompañarán a los que hayan creído: arrojarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos, y si beben un veneno mortal, no les hará daño; impondrán las manos a los enfermos y éstos quedarán sanos".

Reflexión sobre la Primera Lectura

Este pasaje nos muestra con mucha claridad lo que significa la conversión. En muchos cristianos se tiene la idea de que la conversión es pasar de ser malo a ser bueno, y aunque de alguna manera se pueda aplicar este pensamiento, la conversión es algo mucho más profundo, pues implica dejar de ser lo que se era para reiniciar una vida dirigida por el Espíritu Santo. 

San Pablo, de acuerdo a su testimonio, era un hombre muy religioso y piadoso cuyo celo lo había llevado a perseguir a los cristianos a quienes consideraba que eran una secta que atentaba contra la fe revelada por el mismo Yahvé. En Damasco, su vida se ve transformada y orientada totalmente hacia Cristo, quien por la acción del Espíritu Santo le revelará la verdad de Dios en el Corazón. 

Convertirse entonces implica dejarse tocar interiormente por Dios, permitirle entrar hasta el último rincón de nuestra vida y dejar que su Espíritu lo guíe e ilumine. Esto hace de la persona una "nueva creatura", como el mismo Pablo lo propondrá. Pídele a Dios con todo tu corazón que tú puedas tener también esta experiencia interior, que puedas llegar a tener "un encuentro de ojos abiertos y corazón palpitante con Jesús".

Reflexión sobre el Evangelio

La fiesta de la "Conversión de San Pablo", nos recuerda el gran mandamiento de Jesús de evangelizar, pero al mismo tiempo, el hecho de que no se puede dar lo que no se tiene.

Si hoy en el mundo se vive un paganismo práctico, que lleva a la violencia, al robo, al atropello de los valores humanos, a la corrupción, es porque falta en muchos de los cristianos una conversión profunda. Sin embargo, usando las palabras del apóstol, nos ponemos a pensar: pero, ¿cómo creerán, si no hay quien les anuncie? Y cuando se les anuncia, ¿cómo creerán si la vida de los que predican no es conforme a lo que predican? 

Un solo hombre comprometido y tocado profundamente por el amor de Dios, recorrió todo el mundo conocido, hablando de Aquél que había cambiado su vida. Fue así como el mundo pagano se convirtió a la luz y al amor de Cristo.

Déjate tocar por el amor de Dios, y responde con generosidad, siendo portador de ese amor en tu casa, tu empresa, o tu escuela. Recuerda que Dios te necesita.

Oración

Señor Jesús, que tu Santo Espíritu quite de mis ojos las escamas que me impiden ver tu acción en mi vida, y que me libere para que mis palabras y acciones testifiquen con poder que tú eres el Señor.

Acción

Como signo de mi conversión, buscaré hacer de mí un instrumento para que más personas puedan conocer el Evangelio de Jesucristo.

Adaptado de:
Evangelización Activa, Evangelio del Día, Archidiócesis de Madrid
Verificado en:
Ordo Temporis 2016, Conferencia Episcopal de Costa Rica